
OpenAI ha comenzado a desplegar una nueva funcionalidad en ChatGPT que permite al modelo recordar interacciones previas con el usuario y emplear esa información para ofrecer respuestas más contextualizadas. Según informa TechCrunch, esta nueva capacidad, denominada memoria , se está activando progresivamente para los suscriptores de pago del servicio, aunque con exclusiones geográficas debido a requisitos regulatorios.
we have greatly improved memory in chatgpt–it can now reference all your past conversations!
this is a surprisingly great feature imo, and it points at something we are excited about: ai systems that get to know you over your life, and become extremely useful and personalized.
— Sam Altman (@sama) April 10, 2025
Desde su lanzamiento, ChatGPT ha sido una herramienta de inteligencia artificial conversacional que procesa entradas textuales sin retener información previa entre sesiones. Esto limitaba la continuidad de las interacciones, obligando a los usuarios a repetir datos o preferencias constantemente. La introducción de una memoria persistente representa un cambio significativo hacia una experiencia conversacional más personalizada y eficiente.
Esta actualización se enmarca dentro de una tendencia más amplia en el sector de los modelos generativos, donde empresas como Google ya han comenzado a implementar características similares en sus asistentes basados en inteligencia artificial. En concreto, el servicio Gemini de Google incorporó recientemente funcionalidades que también permiten conservar contexto histórico.
Qué es la función de memoria en ChatGPT
La función «memoria» permite a ChatGPT registrar información compartida por el usuario durante conversaciones anteriores —como nombre, estilo preferido de respuesta u otros datos relevantes— y reutilizarla para mejorar futuras interacciones. Esta funcionalidad busca evitar repeticiones innecesarias y dotar al modelo de una mayor coherencia entre sesiones.
Según OpenAI, este cambio afecta no solo a las respuestas textuales, sino también a las capacidades del modelo en generación por voz e imagen. De este modo, se amplía el alcance contextual a todos los modos de interacción disponibles en ChatGPT.
Lanzamiento por fases y restricciones geográficas
La nueva función estará disponible inicialmente para los suscriptores de los planes ChatGPT Plus y Pro. Sin embargo, no se activará aún en el Reino Unido ni en países del Espacio Económico Europeo como Islandia, Liechtenstein, Noruega o Suiza. OpenAI explica que estas regiones requieren revisiones regulatorias adicionales antes del despliegue.
No se ha especificado una fecha para su disponibilidad general ni para usuarios gratuitos. La decisión refleja un enfoque escalonado centrado primero en clientes abonados y entornos regulatorios menos restrictivos.
Privacidad y control por parte del usuario
A pesar del carácter proactivo de esta funcionalidad, OpenAI ha incorporado mecanismos para respetar la privacidad del usuario. En los ajustes del sistema puede desactivarse la memoria globalmente o gestionar recuerdos específicos almacenados.
Además, es posible iniciar un «chat temporal» —una conversación sin registro ni impacto en la memoria— o preguntar directamente al sistema qué información conserva sobre el usuario. Estas opciones proporcionan transparencia y control sobre el uso continuo de datos personales dentro del modelo.
Este tipo de medidas apunta a mitigar las preocupaciones derivadas del almacenamiento automatizado de información sensible o repetitiva por parte del sistema.
Evolución respecto a versiones anteriores
No es la primera vez que OpenAI introduce capacidades relacionadas con la persistencia de información. En 2023 ya se incorporó la posibilidad explícita de pedirle a ChatGPT que recordara o eliminara ciertos datos sobre el usuario. No obstante, esta función requería instrucciones concretas por parte del interlocutor.
La diferencia clave reside en que ahora dicho proceso es automático: si está habilitada la memoria, el sistema actualizará sus recuerdos sin necesidad de comandos específicos por parte del usuario.
Implicaciones futuras
La incorporación estructural de memoria posiciona a ChatGPT como una herramienta más útil para entornos empresariales donde la personalización continua puede traducirse en ahorros operativos o mejoras significativas en atención al cliente.
Por ejemplo, un asistente virtual con conocimiento previo sobre preferencias habituales podría agilizar tareas recurrentes como generación de informes ejecutivos o elaboración automática de resúmenes personalizados. También podría facilitar casos más complejos como asistencia legal básica u orientación técnica adaptada al perfil profesional del usuario.
No obstante, surgen interrogantes regulatorios relevantes. En el contexto europeo —incluyendo España— los marcos legales como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) exigen una gestión explícita del consentimiento informado y derecho al olvido. Estos aspectos podrían condicionar o retrasar la disponibilidad plena de estas funcionalidades fuera del ámbito anglosajón.
A medio plazo, esta evolución podría consolidar nuevos estándares conversacionales basados en modelos generativos capaces no solo de responder sino también de construir relaciones contextuales sostenidas con usuarios individuales.