Cisco, en colaboración con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), ha lanzado el Digital Well-being Hub , una innovadora plataforma que ofrece el primer análisis global sobre la relación entre el bienestar de las personas y el uso de la tecnología.
Este esfuerzo busca comprender, con una perspectiva amplia, los efectos de la digitalización en aspectos esenciales de la vida, como la salud mental, la satisfacción vital y la ciberseguridad.
La creación de este hub responde a una realidad alarmante: en los países de la OCDE, el 40% de los adultos carecen de habilidades digitales básicas, lo cual limita su capacidad para desenvolverse en entornos digitales de forma segura.
Esta carencia de competencias no solo afecta la privacidad y la seguridad online, sino que también puede tener repercusiones en la salud mental, especialmente ante la creciente presencia de la inteligencia artificial (IA), que preocupa a más de la mitad de los trabajadores debido a la posibilidad de sesgos en decisiones laborales.
Objetivos del Digital Well-being Hub
El Hub surge en el contexto del programa Country Digital Acceleration de Cisco, una plataforma de co-innovación que busca impulsar economías inclusivas y resilientes. Según explica Guy Dietrich, Vicepresidente Senior de Innovación en Cisco, el bienestar digital es una dimensión compleja que va más allá de una simple interacción con la tecnología. “Nunca hemos examinado de manera exhaustiva el impacto de la tecnología en nuestro bienestar cotidiano. Este Hub permitirá recopilar evidencia para entender cómo nos afecta y construir relaciones más saludables con la tecnología”, señaló.
Entre las dimensiones que explora el Digital Well-being Hub destacan factores como la salud mental, las habilidades digitales, el compromiso cívico, la conciencia climática y las conexiones sociales. Esta plataforma permitirá a los visitantes interactuar y analizar datos de la OCDE sobre diferentes aspectos del bienestar, construyendo un enfoque integral que sirva como base para desarrollar políticas digitales inclusivas.
Una iniciativa para reducir la brecha digital global
El Digital Well-being Hub también pretende visibilizar las disparidades globales en el acceso y uso de la tecnología. Francine Katsoudas, Directora de Personas, Políticas y Propósitos de Cisco, enfatiza la importancia de conectar a los 2.600 millones de personas en todo el mundo que aún carecen de acceso a Internet. Katsoudas sostiene que cerrar esta brecha es esencial para garantizar que los beneficios del mundo digital lleguen a todos, y que el bienestar digital no se convierta en un privilegio limitado a ciertas regiones.
“Digital Well-being Hub pone de relieve cómo la tecnología avanzada puede construir comunidades más saludables. Pero también resalta una urgente llamada a la acción: hay un tercio de la población mundial sin acceso a Internet, mayormente en los países más pobres. Reducir esta brecha es el primer paso hacia un bienestar digital inclusivo”, afirmó Katsoudas.
Investigación sobre los efectos de la digitalización en la vida cotidiana
La propuesta del Digital Well-being Hub se enfoca en ofrecer una visión completa sobre cómo las herramientas digitales afectan la vida diaria. Este análisis detallado pretende abordar las contradicciones inherentes a la digitalización, donde la tecnología puede mejorar el bienestar económico y social, pero también puede acarrear riesgos cuando su uso es excesivo o problemático.
Por ejemplo, aunque la IA ofrece oportunidades para mejorar la productividad y las condiciones laborales, también puede mostrar sesgos de género o étnicos que afecten a determinados colectivos. Asimismo, las redes sociales, a pesar de facilitar la conexión entre personas, pueden intensificar la soledad o afectar la salud mental, fenómenos que el Hub estudia bajo la perspectiva de los datos de la OCDE.
Según Romina Boarini, Directora del Centro para el Bienestar, la Inclusión, la Sostenibilidad y la Igualdad de Oportunidades de la OCDE, esta plataforma permitirá comprender mejor cómo las personas viven y perciben el mundo digital. “Hasta un 14% de las personas en los países de la OCDE se sienten solas, y el uso excesivo de herramientas digitales podría aumentar esta cifra. A través del Hub, estudiaremos estas consecuencias no deseadas y ofreceremos datos que orienten políticas más inclusivas y sostenibles”, indicó Boarini.
Crowdsourcing para construir una visión integral
Una de las características más innovadoras del Digital Well-being Hub es su capacidad para integrar datos de crowdsourcing en su análisis. Durante los próximos meses, Cisco y la OCDE invitarán a personas de todo el mundo a compartir sus experiencias digitales, que serán combinadas con datos existentes de la OCDE para conformar una imagen más completa del bienestar digital.
La OCDE utilizará estas aportaciones subjetivas para desarrollar un informe en 2025 que analice los efectos de la digitalización desde una perspectiva integradora. Este estudio buscará responder a cuestiones críticas, como los efectos de las habilidades digitales en las oportunidades laborales, la influencia de la IA en la percepción de seguridad y la relación entre el uso de redes sociales y el compromiso cívico.
En definitiva, el Digital Well-being Hub no solo aspira a entender cómo la tecnología impacta en distintos aspectos de la vida, sino también a identificar formas de mejorar la relación entre las personas y el mundo digital. La información recopilada será fundamental para orientar políticas que promuevan un futuro digital más inclusivo, seguro y orientado al bienestar de todos.
