Pangea Aerospace, start-up con sede en Barcelona y Toulouse especializada en el desarrollo de sistemas de propulsión (motores) para cohetes y satélites, ha ganado la licitación del PERTE Aeroespacial para el desarrollo de un lanzador de pequeños satélites que asciende a 42M€ con una propuesta de valor competitiva y sostenible que sitúa a España en la vanguardia de la industria.
En la licitación pública, Pangea ha liderado un consorcio de empresas españolas bajo el nombre de “Equipo Nacional” donde ha obtenido la puntación más alta, destacando particularmente en el apartado de la solución técnica, que obtuvo la mejor valoración de los expertos. De esta manera, Pangea comienza a trabajar en la primera fase del proyecto, hasta finales de 2023, cuando se dará inicio a la segunda fase. Todas las compañías del consorcio están altamente especializadas bajo un objetivo común: diseñar y fabricar un lanzador innovador, sostenible y eficiente para pequeños satélites.
Composición y ventaja diferencial del ”Equipo Nacional”
Una de las características clave del “Equipo Nacional” es la descentralización, ya que las cinco empresas españolas que lo conforman pertenecen a cinco comunidades autónomas diferentes, permitiendo diversificar en el territorio español los beneficios que implica un incentivo de este tipo tanto para las empresas, como para el desarrollo productivo del país y la generación de empleo. Además, la elevada especialización de estas compañías permite ofrecer innovadores sistemas integrados en una sola propuesta, de mayor valor, con tiempos de desarrollo más cortos y apoyándose en sistemas ya desarrollados para los principales componentes del lanzador.
El Equipo Nacional de pequeños lanzadores está formado por: ITP Aero, empresa líder de motores y componentes aeronáuticos y con la sede central en el País Vasco; GMV que aporta su conocimiento en desarrollo de aviónica y GNC con sede central en Madrid; UARX Space con sede en Nigrán, Galicia y que aporta soluciones de sistemas de separación y despliegue de satélites en órbita y Aenium para la ingeniería de materiales y fabricación avanzada, con sede en Valladolid; el proyecto también se apoya sobre una extensa red nacional de proveedores de primer nivel.
A principios de 2023 se creó el consorcio que aplicó al PERTE para desarrollar el lanzador español capaz de competir en el mercado global en las próximas décadas y que será el más sostenible del mercado. Desde una base horizontal y descentralizada, la filosofía de este grupo está guiada por la colaboración entre varias empresas especializadas en diferentes aspectos que integran sus capacidades y experiencias en sus campos respectivos para conseguir que España tenga un lanzador de tecnología de primer nivel y el más sostenible del mercado ya que cumple con los principios DNSH (“Do not significant harm”, en español “no causar perjuicio significativo al medioambiente”), una condición obligatoria para los proyectos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PERTE). Es importante destacar que la propuesta técnica presentada por Pangea fue mejor valorada por los técnicos expertos del Gobierno y también es claramente una propuesta de valor más competitiva y sostenible en el bloque de DNSH.
Pangea aporta a la licitación del PERTE un disruptivo motor que ha hecho historia
Pangea Aerospace aporta a la colaboración con el consorcio su motor ARCOS, de tipo Aerospike, que utiliza combustibles verdes y se puede reutilizar hasta 10 veces y el desarrollo del sistema en su rol de líder del consorcio.
Es importante destacar que Pangea ha hecho historia recientemente al encender por primera vez en la industria aeroespacial un motor de tipo Aerospike con biometano y oxígeno líquido como propelentes. Este motor genera principalmente emisiones de vapor de agua y reduce un 50% su impacto medioambiental en comparación con los motores convencionales, que utilizan queroseno y son más contaminantes. Además, consume un 15% menos de combustible y permite transportar un 30% más de carga útil respecto a otros sistemas estándares.
Los resultados que ha extraído la compañía en las pruebas técnicas indican que el motor ARCOS incrementa la rentabilidad hasta un 30% en cada lanzamiento. Gracias a ello, Pangea está democratizando el acceso y las operaciones en el espacio con una propuesta de valor más eficiente, sostenible y competitiva que las que hay actualmente en el mercado.
La competitividad y la sostenibilidad, claves para el Gobierno y fundamentales en el PERTE
Esta licitación se enmarca en el PERTE Aeroespacial que pretende movilizar cerca de 4.500 millones de euros hasta 2025. Dicho PERTE engloba un conjunto de actuaciones orientadas a mejorar y generar capacidades tecnológicas e industriales en el sector aeroespacial, así como avanzar en un mejor posicionamiento estratégico de la industria radicada en España en campos clave del sector aeronáutico y espacial. En el área de espacio, el PERTE persigue el establecimiento de un programa de tecnología espacial que genere nuevas capacidades innovadoras e industriales propias y que, aporte servicios relacionados con la sostenibilidad.
En este sentido, actualmente no existen otras propuestas viables de bajo impacto ambiental desde el punto de vista técnico y económico en el ámbito de los lanzadores. La mayoría de las alternativas actuales utilizan queroseno, cuyas emisiones son CO2, hollín, monóxido de carbono y algunos compuestos de azufre; por la actividad de los cohetes, estas emisiones son inyectadas directamente en las capas superiores de la atmósfera, que generan un impacto significativamente mayor al medio ambiente. Por este motivo, la alternativa que ofrece Pangea Aerospace con su propuesta de valor es competitiva y rentable, y significativamente mejor en el área de sostenibilidad que las otras ofertas que se han presentado al PERTE de pequeños lanzadores.
Pangea Aerospace cierra la venta de su primer motor y aspira a facturar 300 millones de euros en 2030
La start-up ha confirmado recientemente la viabilidad técnica y ha cerrado el primer acuerdo de venta de su motor ARCOS a la empresa Tehiru, que lo integrará en su cohete, convirtiéndose así en el primer cohete en el mundo con tecnología avanzada de propulsión.
Este acuerdo puede llegar a suponer unos ingresos de hasta 50 millones de euros en los próximos 5 años para Pangea Aerospace. La compañía tiene previsto facturar más de 300 millones de euros anuales en 2030 con este producto.