LLYC ha celebrado el webinar «10 retos sociales, tecnológicos y políticos de la humanidad: una visión regulatoria de la nueva normalidad», en el que se ha presentado el informe que, bajo el mismo título, ha elaborado Roger Montañola, Director Senior de Asuntos Públicos de LLYC, e Ignasi Belda, Senior Advisor.
El webinar ha contado con la participación de Carme Artigas, Secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial; Gianpaolo Santorsola, CEO de Adevinta Spain; Olivier Puech, Presidente de América Latina y EMEA de American Tower y Fernando Olivares, Vicepresidente North de Latam de Medtronic.
Carme Artigas ha señalado que, a final de mes, se anunciará la Agenda Digital del Gobierno y, posteriormente, se hará pública la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial. Sobre la cual ha explicado que “estará orientada al desarrollo del ámbito científico y tecnológico de España, pero, sobre todo, a proveer la creación de un sector nuevo de start-ups, de empresas digitales; en cómo incorporar la IA en la cadena de valor de las empresas existentes para aumentar su productividad y sus ventajas competitivas y en cómo somos capaces de generar un entorno de confianza alrededor de la IA y un debate sobre cómo aseguramos el humanismo tecnológico”.
En cuanto a los retos de la IA, la Secretaria de Estado ha destacado que tiene cuatro retos principales: “el reto tecnológico, asegurar que el desarrollo de la Inteligencia Artificial sea robusto, con tecnologías fiables y explicables; el reto normativo, dotarnos del entorno legal que nos permita ejercer los derechos digitales de las personas; el reto ético, cómo la Inteligencia Artificial cuadra con nuestros principios y con nuestros valores y cómo lograr que opere en beneficio de la inclusión y el bienestar y el reto social, no podemos desarrollar la Inteligencia Artificial sin evaluar su impacto a nivel de riesgo humano, a nivel de inclusión. Hemos de ser capaces de que la ciudadanía también participe en el debate sobre lo que va a ser el uso de la IA”.
Por último, Carme Artigas ha destacado que la reconstrucción económica de nuestro país a la que nos enfrentamos, “necesariamente debe ser digital”.
Gianpaolo Santorsola, ha destacado algunas de los hábitos que ha provocado la pandemia, como el teletrabajo, la búsqueda de vivienda alrededor de las grandes ciudades o el impulso del transporte individual y ha subrayado que la tecnología deberá dar respuesta a estas nuevas necesidades, de hecho estamos viendo como se adapta rápidamente a ellas. En este sentido, ha puesto de manifiesto la necesidad de poner a Europa dentro del mapa tecnológico mundial y de que exista una coherencia en la regulación europea en esta materia que no frene ese desarrollo.
Olivier Puech ha hecho hincapié en la brecha tecnológica que todavía existe a nivel mundial. “El 46% de la población mundial no tiene acceso a Internet”. También ha señalado la importancia de la regulación en relación con el desarrollo tecnológico: “hay países donde se facilita la instalación y otros en los que la legislación es menos flexible. En una crisis como la vivida con la Covid-19 la existencia de reglas muy rígidas no ayuda”.
Fernando Olivares, ha hablado sobre los cambios que la tecnología va a provocar en el ámbito de la medicina “vamos a pasar de la patogénesis, que es enfocarse en la enfermedad a salutogénesis que es generar salud y que la gente busque más mantener la salud, que no curar una enfermedad. En ese sentido la medicina va a ser predictiva, preventiva, personalizada y participativa y se va a producir una superespecialización de los médicos”. También destacó que los pasaportes biométricos de salud van a ser una realidad.
Diez retos para la nueva normalidad
Roger Montañola, moderador del debate ha explicado que “el documento identifica los diez principales retos científicos y tecnológicos de los próximos años, así como las ventajas y los riesgos que comportan. Ofrece una visión a medio y largo plazo de los nuevos recursos que estarán a disposición de la humanidad en los próximos tiempos, así como alerta de la necesidad de que, sin demora, se adopten marcos regulatorios, ágiles, adecuados y globales.
Ignasi Belda, ha hecho una descripción de estos retos afirmando que “abarcan ámbitos muy diversos, que van desde la modificación del ADN humano –y, por tanto, la modificación de la especie humana– hasta el cambio climático o la evolución hacia una gobernanza global. En concreto, son los siguientes: la inteligencia artificial, la modificación de la especie humana, el cambio climático y la sostenibilidad, la nueva movilidad, la economía colaborativa, los nuevos patrones sociales, la alimentación global, los nuevos materiales, la exploración espacial y la gobernanza global”.
