La mayoría (63%) de organizaciones sanitarias, tanto biofarmacéuticas como de tecnología médica, ya tiene productos de salud conectada[1] en el mercado o en fase de desarrollo. Independientemente de la fase de desarrollo de sus productos, las organizaciones sanitarias prevén que la salud conectada contribuya a generar más de una quinta parte de sus ingresos totales en cinco años, aunque la falta de capacidades de datos esenciales podría obstaculizar este objetivo. Así se desprende del último informe del Instituto de Investigación de Capgemini, «La Revolución de la Salud Conectada», según el cual tres de cada cinco organizaciones sanitarias están desarrollando una hoja de ruta para integrar la IA generativa y más de la mitad ya está probando esta tecnología para interactuar con pacientes y profesionales sanitarios.
Mientras que alrededor de la mitad de las organizaciones cree que sus esfuerzos de salud conectada se han intensificado, la mayoría admite que todavía faltan capacidades sólidas de gestión de datos. A pesar de tener un enfoque hacia la salud conectada basado en una estrategia más desarrollada y una extensa planificación, en comparación con lo que sucedía hace tres años, la investigación confirma que hay una falta general de marco común, normas y herramientas para el manejo de datos en relación con la salud conectada.
Aumenta la salud conectada en biofarmacia y tecnología médica
El informe también concluye que se ha multiplicado por seis el número de organizaciones biofarmacéuticas con productos de salud conectada aptos para su comercialización en el mercado desde 2021. Si bien la atención preventiva y el ejercicio físico siguen siendo las principales prioridades para la mayoría de las organizaciones biofarmacéuticas, cada vez se hace más hincapié en áreas anteriormente desatendidas, como el diagnóstico y la monitorización. La oncología, la inmunología y la cardiología son los principales focos de atención para la mayoría de las empresas biofarmacéuticas, y áreas emergentes como la salud mental, la diabetes, la obesidad y la dermatología, también muestran un enorme crecimiento desde 2021.
La salud conectada también sigue siendo una prioridad para las organizaciones de tecnología médica. Así, tres de cada cuatro admiten que ya tienen productos de salud conectada en el mercado o en fase de desarrollo. Las soluciones de salud digital y los dispositivos wearables son sus principales áreas de interés.
Crece la implantación de los datos y la IA
Según el informe, las organizaciones biofarmacéuticas han progresado considerablemente en el aprovechamiento de la inteligencia artificial (IA), el aprendizaje automático (ML) y el Cloud en los últimos tres años. Como resultado, las organizaciones biofarmacéuticas que utilizan IA para el análisis predictivo de datos en tiempo real de productos sanitarios conectados, casi se han duplicado desde 2021, pasando del 24% al 46%. Además, el informe señala que más de dos quintas partes (42%) también tienen una plataforma en el Cloud para la integración de datos de diferentes fuentes.
Sin embargo, solo una minoría de las organizaciones sanitarias encuestadas mencionó que tenía un suministro adecuado de habilidades técnicas como AR/VR e IA generativa. Para salvar esta brecha, casi dos tercios de las organizaciones admiten que prefieren mejorar las competencias de su plantilla actual, mientras que el 56% se muestra partidario de contratar nuevos talentos.
Las organizaciones sanitarias están probando una amplia variedad de casos de uso de IA generativa
La IA generativa tiene el potencial de contribuir en toda la cadena de valor de la atención sanitaria, que incluye la investigación, el desarrollo clínico, las operaciones, la normativa, el cumplimiento, la comercialización y las operaciones posteriores al lanzamiento. El informe revela que más de la mitad de las organizaciones están probando actualmente la IA generativa para las interacciones con los pacientes y profesionales sanitarios, mientras que también están experimentando con aplicaciones de IA generativa para producir datos sintéticos, analizar datos existentes, automatizar la documentación y elaborar informes, gestionar proveedores, diseñar productos e identificar centros para ensayos clínicos.
Si bien la salud conectada ofrece nuevas oportunidades para la industria, es necesario que las organizaciones sanitarias establezcan una visión clara y adapten las ofertas a las necesidades específicas de atención médica y bienestar para que puedan proporcionar un impacto medible, concluye el informe. Invertir en el desarrollo de una infraestructura de datos escalable, segura y conforme a las normas, y reforzar la colaboración con otras partes interesadas del ecosistema, también les permitirá generar un valor tangible para todas las partes interesadas.
[1] Capgemini ha definido el término «salud conectada» como el valor aportado en la intersección de lo digital y la atención sanitaria. La salud conectada en la tecnología médica abarca un sólido conjunto de ofertas que van desde dispositivos implantables y portátiles hasta equipos médicos de capital, y los ecosistemas digitales y de datos que los rodean y lo impulsan todo, desde el diagnóstico hasta la atención remota, los procedimientos y la atención posterior al procedimiento.