La Industria 4.0 se ha convertido en una revolución tecnológica que está transformando la forma en que las empresas integran sus procesos de fabricación, conllevando una producción más flexible, eficiente y personalizada gracias a la implantación de tecnologías digitales, como el Internet de las cosas (IoT), la inteligencia artificial (IA) o la automatización robotizada.
En la mayoría de las compañías, los sistemas de IT (Information Technologies) y OT (Operational Technologies) han sido históricamente independientes, con diferentes objetivos y requisitos.
Por eso, su convergencia es un proceso que plantea grandes beneficios para la digitalización industrial, ya que mejora la eficiencia de los procesos, genera sinergias operativas y aumenta una comunicación fluida entre unos procesos de fabricación más automatizados y autónomos.
Los sistemas de IT, que refieren a las soluciones que soportan las operaciones corporativas, comerciales, financieras o de operaciones, se han centrado en dar respuesta a procesos de negocios más institucionales, en la recopilación de datos y en la automatización de los procesos empresariales.
Los sistemas de OT, que aluden al conjunto de soluciones y tecnologías que dan respuesta a los requisitos específicos de la operación industrial en tiempo real, se han centrado en el control de los procesos de producción y en la gestión de los sistemas de fabricación, como son los sistemas SCADA o los Historians y, en un plano más físico, robots, AGVs/ AMRs o los sistemas de automatización.
Su alineación permite a las empresas adoptar un enfoque más holístico de sus procesos de producción al integrar en un modelo único tecnologías, procesos y equipos que exploten los beneficios de la Industria 4.0. en términos de eficiencia, flexibilidad y seguridad a lo largo de toda la cadena de valor. Así, esta convergencia supondrá a medio plazo un elemento diferencial de competitividad en el sector industrial.
En este sentido, la Industria 4.0 posibilita una mayor agilidad de adaptación al cambio, proveer de una trazabilidad completa y monitorizar y controlar la producción de extremo a extremo. Por ejemplo, se estima que en el horizonte 2024-25 más del 50% de los CIOs de compañías industriales tendrán que asumir responsabilidades tecnológicas en el ámbito OT.
La implantación de un proceso de convergencia IT-OT
Con todo ello, concreta el experto, se elabora una planificación alineada de los objetivos tecnológicos y funcionales que equilibre las perspectivas de arquitectura de sistemas, ciberseguridad, infraestructura y redes, gestión de sistemas, soporte… para llevar a cabo de manera exitosa esta convergencia IT y OT.
Las organizaciones industriales ya están incentivando este necesario cambio de la mano de compañías tecnológicas que también comienzan a liderar el proceso de cambio para, no solo evolucionar procesos, sino también poder hacerlos más eficientes y productivos.
En este sentido, Minsait ha adquirido recientemente Deuser, empresa especializada en tecnología de operaciones (OT) en el ámbito de la digitalización industrial, con el fin de ofrecer a dichas organizaciones un servicio completo de extremo a extremo, desde el ERP y CRM hasta los elementos de control del proceso industrial en la línea de fabricación con soluciones SCADA o software de control para PL. Todo ello, encuadrado en un entorno de SmartFactory o Industria 4.0.
Impacto en las compañías industriales
La implementación de este tipo de estrategias se está convirtiendo en una necesidad operativa y estratégica, los líderes del sector ya han comenzado a dar sus primeros pasos para afrontar este nuevo reto y están observando su potencial, con impactos económicos de hasta 200 millones de dólares anuales.
El desarrollo de un ecosistema global de soluciones gobernado por una estrategia de convergencia entre los procesos gestionados desde el mundo IT y OT permitirá reducir los costes de licencias y mantenimientos hasta un 20%. Así como reducir el riesgo de ciberataques.
La aplicación de nuevas tecnologías a lo largo de toda la cadena de valor generará impactos en los principales indicadores de la operación, con mejoras entre el 3-5% en los indicadores de productividad y del 20-30% en los niveles de servicio. Y mejorará la toma de decisiones al disponer de mayor visibilidad y fiabilidad del dato, lo que facilita la implementación de soluciones de analítica avanzada.
Adicionalmente, el despliegue de estrategias de convergencia y de nuevas soluciones de proveedores de software e hiperescaladores basados en sistemas universales están facilitando la eliminación de las barreras existentes en el pasado entre los mundos IT y OT.
La convergencia IT y OT “es un elemento clave de la Industria 4.0. que permitirá a través de las nuevas tecnologías, que las empresas están mejor posicionadas para competir en el mercado global en el futuro. Ya es un aspecto diferencial para aquellas empresas que han comenzado a abordar este reto. A medio plazo supondrá ser un elemento diferencial en el sector industrial”, concluye Daniel Seseña.
