Editor en La Ecuación Digital. Consultor de Innovación y Estrategia…
El uso creciente de la IA Generativa (Gen AI) está generando un impacto medioambiental significativo, según el informe Desarrollando una Gen AI sostenible del Instituto de Investigación de Capgemini. La mayoría de las organizaciones carecen de estrategias adecuadas para medir y mitigar esta huella, lo que pone en riesgo sus objetivos de sostenibilidad y ESG. Aunque muchas empresas reconocen la importancia de abordar este problema, persisten grandes desafíos para implementar soluciones efectivas.
Impacto medioambiental de la IA Generativa
La rápida adopción de la IA Generativa ha multiplicado su huella ecológica. Según el informe, el 48% de los ejecutivos encuestados señala un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) como consecuencia directa de su uso. Este impacto se deriva del elevado consumo energético requerido para procesar grandes volúmenes de datos y la infraestructura computacional necesaria para operar modelos de IA avanzados.
Se espera que el porcentaje de emisiones generadas por la IA Generativa en relación con el total de emisiones de carbono de las organizaciones aumente del 2,6% al 4,8% en los próximos dos años. Para contrarrestar este crecimiento, las empresas están adoptando medidas como el uso de energía renovable y la optimización de la infraestructura de IA.
Falta de seguimiento y priorización
A pesar de su impacto ambiental, pocas organizaciones miden o priorizan la sostenibilidad de la IA Generativa. Solo el 12% de las empresas realiza un seguimiento detallado de la huella medioambiental asociada a esta tecnología. Además, únicamente el 20% de los ejecutivos considera la sostenibilidad como uno de los factores clave al seleccionar modelos o proveedores de Gen AI.
Más de la mitad de las empresas encuestadas reconocen que impulsar la eficiencia operativa prevalece sobre medir el impacto ambiental. Esta falta de priorización refleja una tensión entre la necesidad de aprovechar la tecnología para la competitividad empresarial y la urgencia de gestionar su coste medioambiental.
Dependencia de socios tecnológicos
Dado que más del 75% de las empresas utiliza modelos de IA Generativa preentrenados en lugar de desarrollar sus propios sistemas, los ejecutivos dependen en gran medida de los proveedores para gestionar el impacto ambiental de la tecnología. Sin embargo, la falta de transparencia y la inexistencia de estándares comunes dificultan la evaluación precisa de la huella medioambiental. Casi tres cuartas partes de los ejecutivos citan esta limitación como un obstáculo significativo.
El informe destaca que una mayor colaboración dentro del sector y el desarrollo de normas comunes son esenciales para proporcionar a las empresas herramientas y métricas fiables. Estas iniciativas permitirían a las organizaciones tomar decisiones más responsables en términos medioambientales.
Estrategias para un uso sostenible de la IA Generativa
Capgemini propone una hoja de ruta para que las empresas adopten prácticas más sostenibles en el uso de Gen AI. Entre las recomendaciones, se incluyen:
- Evaluación previa del impacto: Analizar la relación coste-beneficio ambiental de los proyectos de IA Generativa antes de su implementación.
- Prácticas sostenibles en todo el ciclo de vida: Desde la elección de hardware eficiente hasta el diseño de modelos optimizados y el uso de energía renovable.
- Uso estratégico: Identificar casos de uso donde la IA Generativa pueda contribuir directamente a los objetivos de sostenibilidad, como en la optimización de recursos o el diseño de productos circulares.
El informe también destaca el papel de los modelos de gobernanza multidisciplinares y la colaboración entre stakeholders del ecosistema de IA para garantizar un uso ético y sostenible. El 62% de los ejecutivos considera que una gobernanza robusta podría mitigar de manera efectiva el impacto medioambiental.
Potencial para iniciativas sostenibles
A pesar de sus desafíos, la IA Generativa también tiene el potencial de impulsar objetivos de sostenibilidad. Un tercio de las empresas ya está utilizando esta tecnología para iniciativas como la elaboración de informes ESG y la optimización de materiales. Además, dos tercios de los ejecutivos anticipan que la IA Generativa podría reducir las emisiones de GEI en más de un 10% en los próximos 3-5 años. Sin embargo, estas expectativas dependen en gran medida de un seguimiento más riguroso y una comprensión más profunda de su impacto ambiental.
Motor de valor sostenible
El informe de Capgemini subraya que, para que la IA Generativa sea un motor de valor sostenible, es fundamental que las organizaciones integren prácticas responsables en su uso. Esto implica no solo adoptar tecnologías más eficientes y sostenibles, sino también colaborar con los actores del sector para establecer estándares y metodologías comunes.