Los datos ponen de relieve que las pymes no son conscientes de que sus propios empleados pueden causar daño a la empresa , sea de forma consciente o no. Un mal comportamiento puede provocar pérdidas financieras, daños reputacionales y reducir la productividad.
Según el informe Kaspersky 2022 IT Security Economics elaborado tras entrevistar a 3.000 responsables IT de 26 países, el 22% de las brechas de seguridad en las pymes fueron causadas por empleados. En concreto, uno de cada tres ciberataques busca el sabotaje o tiene como fin el espionaje.
De este modo, los expertos de Kaspersky revelan las principales causas de las brechas de seguridad en las pymes y cómo evitarlas brindando educación a los empleados:
● Phishing e ingeniería social. El empleado hace clic en un enlace que proviene de una fuente de confianza que generalmente le llega por correo electrónico. Los ciberdelincuentes se hacen pasar por empresas o personas conocidas para ganarse a la víctima. Al hacer clic en el link, se abre la puerta de la red corporativa a los atacantes, que secuestrarán los datos y pedirán un rescate por ellos. Lo habitual es que esos datos acaben vendiéndose en la darkweb.
● Claves frágiles. En muchos casos, los empleados cambian las claves corporativas por otras más sencillas de recordar, pero que pueden ser vulneradas por los ciberdelincuentes, accediendo a datos sensibles de la empresa. Una contraseña fuerte debe tener letras, números y caracteres. Además, se deben evitar datos personales o aquellos que puedan ser fácilmente asociados al usuario, como nombre y apellidos.
● Bring Your Own Device (BYOD). Muchos empleados teletrabajan con sus dispositivos personales. Esto aumenta el riesgo de sufrir ciberataques porque suelen ser equipos con menos seguridad que los corporativos. Si se tiene en cuenta que cada día aparecen 400.000 nuevos archivos maliciosos, el riesgo es evidente. A pesar de ello, muchas empresas permiten el acceso a información corporativa desde dispositivos personales.
● Actualizaciones. En muchas ocasiones, no se instalan por pereza o tiempos. Sin embargo, los equipos no actualizados están más desprotegidos, ya que las actualizaciones incorporan parches de seguridad que repelen las nuevas vulnerabilidades.
● Ransomware. Es crucial tener una copia lo más actualizada posible de los datos de la empresa, algo que no todas las organizaciones hacen. Cuando los ciberdelincuentes secuestran la información, no disponer de copias de seguridad puede suponer que la empresa tenga que cesar su actividad, al no poder recuperar datos fundamentales para seguir operando.
Para evitar este tipo de riesgos, los expertos de Kaspersky recomiendan:
● Proteger los datos y dispositivos corporativos. Esto incluye proteger las contraseñas, cifrar los dispositivos y tener copias actualizadas de la información corporativa.
● Asegurarse de que al alejarnos del equipo este se encuentre apagado o con activación por clave.
● Proteger todos los dispositivos, tanto personales como corporativos (en oficina o en remoto), con soluciones de seguridad. Kaspersky Small Office Security puede instalarse de forma remota y administrarse desde la nube, y no hay que tener conocimientos específicos para hacerlo.
● Utilizar una solución específica para pymes con una administración sencilla y una protección comprobada. Es el caso de Kaspersky Endpoint Security Cloud. De forma adicional, es importante delegar el mantenimiento de la ciberseguridad a un proveedor con capacidad de hacerlo de forma personalizada.