La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, participó esta mañana en el Foro Económico Mundial de Davos , subrayando en su intervención los desafíos y oportunidades que enfrenta Europa en un panorama global marcado por la rivalidad geoestratégica, la transición climática y el avance tecnológico. Von der Leyen presentó las líneas maestras de una estrategia que busca consolidar la competitividad económica y tecnológica de la Unión Europea en los próximos años.
Reflexión sobre 25 años de globalización
Von der Leyen comenzó su intervención analizando los cambios experimentados desde el inicio del siglo XXI, cuando la globalización alcanzaba su apogeo. Aunque el comercio internacional y la cooperación tecnológica han impulsado el progreso en numerosos ámbitos, también se han generado nuevas fracturas y desafíos. Según la presidenta, estas incluyen el aumento de barreras comerciales, la vulnerabilidad de las cadenas de suministro y el uso de tecnologías estratégicas como herramientas de presión geopolítica.
La necesidad de una Europa más competitiva
Ante este escenario, Von der Leyen enfatizó que Europa debe transformarse para mantener su posición en un mundo donde la competencia por recursos, tecnología y mercados es cada vez más intensa. «Los días de depender del comercio global y de la energía barata han quedado atrás», declaró, subrayando la necesidad de una respuesta estratégica para impulsar la innovación y la sostenibilidad.
Tres pilares para el futuro europeo
Von der Leyen desgranó tres áreas clave para garantizar el liderazgo de Europa:
- Unión de Mercados de Capitales: Europa cuenta con un alto nivel de ahorro privado, pero la fragmentación de los mercados dificulta convertir este ahorro en inversiones. La Comisión propone la creación de una Unión Europea de Ahorro e Inversión, simplificando el acceso al capital para startups tecnológicas y proyectos de energía limpia.
- Simplificación regulatoria y apoyo a las empresas: Para fomentar el crecimiento empresarial, la Comisión se propone reducir la burocracia y establecer un marco normativo único, denominado “28º régimen”, que facilite la operación de empresas en toda la Unión.
- Independencia energética y transición verde: Von der Leyen destacó los avances en la reducción de la dependencia de combustibles fósiles rusos y en el desarrollo de energías renovables. Anunció un nuevo plan para febrero que buscará completar la Unión Energética, diversificar las fuentes de energía y modernizar infraestructuras clave.
Competencia y cooperación internacional
La presidenta también abordó la relación de Europa con otras potencias, como Estados Unidos y China. Destacó la necesidad de mantener un equilibrio entre defender los intereses europeos y buscar cooperación en áreas de interés mutuo, como la transición climática y la regulación tecnológica. Asimismo, anunció la intención de reforzar alianzas con regiones como América Latina, África y Asia-Pacífico, destacando acuerdos recientes con Mercosur y México.
Un llamado a la acción
Von der Leyen concluyó subrayando la urgencia de abordar los retos globales desde una perspectiva unitaria. «Nuestros valores no cambian, pero debemos actuar de forma diferente para defenderlos en un mundo cambiante», afirmó.
Este discurso en Davos marca un claro mensaje sobre la dirección estratégica de Europa en un contexto global de creciente incertidumbre y competencia, destacando el papel central de la innovación, la sostenibilidad y la cooperación.
