El presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) de Estados Unidos, Brendan Carr, expresó el lunes su fuerte desaprobación hacia la regulación de plataformas en línea y motores de búsqueda en la Unión Europea, calificándola de censura y advirtiendo sobre posibles medidas desde el otro lado del Atlántico.
Durante su intervención en el Mobile World Congress, Carr arremetió contra la Ley de Servicios Digitales (DSA, por sus siglas en inglés), la cual, según él, impone restricciones excesivas en materia de libertad de expresión. Según recoge Telecoms.com, esta normativa de la UE busca garantizar un entorno digital más seguro y responsable, obligando a las grandes empresas tecnológicas, en su mayoría estadounidenses, a asumir mayores responsabilidades en la moderación de contenidos, incluida la eliminación de material ilegal.
Divergencias en la visión regulatoria
El debate sobre la regulación digital ha evidenciado las diferencias entre Estados Unidos y Europa. Mientras la UE defiende la DSA como un mecanismo para garantizar la seguridad en línea, Washington la percibe como un obstáculo para la libertad de expresión y un intento de regulación proteccionista contra sus gigantes tecnológicos.
Carr recordó declaraciones recientes del vicepresidente estadounidense, JD Vance, en la Cumbre de IA de París, en las que calificó la moderación de contenidos como una forma de censura. Según Carr, el modelo europeo es «incompatible con la tradición de libertad de expresión en América».
Además, mencionó que ha contactado a empresas tecnológicas estadounidenses con el objetivo de encontrar una solución que les permita operar en Europa sin enfrentar sanciones excesivas, al tiempo que protejan la diversidad de opiniones en sus plataformas.
Posible respuesta de EE.UU.
El discurso de Carr también sugirió que la administración Trump está dispuesta a intervenir en defensa de las empresas tecnológicas estadounidenses si considera que la regulación europea es discriminatoria. «Si hay un impulso en Europa por adoptar regulaciones proteccionistas y tratar de manera desigual a las empresas tecnológicas de EE.UU., la administración Trump ha dejado claro que defenderemos los intereses de nuestros negocios», afirmó.
El tema de la seguridad también estuvo presente en su discurso, con referencias al programa Rip and Replace de EE.UU., que ha recibido apoyo federal para eliminar equipos chinos de redes de telecomunicaciones. Carr enfatizó las acciones tomadas contra Huawei y ZTE, argumentando que la relación de estas compañías con el gobierno chino es inaceptable para Estados Unidos.
Las declaraciones de Carr dejan en claro que la postura de EE.UU. en este debate es firme: rechazan cualquier regulación que perciban como una barrera para sus empresas y están dispuestos a tomar medidas en respuesta a lo que consideran un trato desigual.
