Editor en La Ecuación Digital. Consultor de Innovación y Estrategia…
Según un estudio de Telefónica y el Instituto DYM realizado entre 542.122 pymes españolas, con una plantilla de entre 3 y 199 empleados, titulado DM Pymes, actualmente el 35% de las pymes dispone de un modelo estructurado de teletrabajo, un 5 por ciento porcentual más que hace 6 meses, y el 61% de ellas afirma que seguirá haciéndolo en el futuro.
En este contexto, Telefónica ha creado un Libro Blanco de Teletrabajo que se divide en las siguientes secciones: introducción y contexto, modelos de trabajo a distancia, nuevo entorno tecnológico del empleado, recomendaciones para el espacio de trabajo, gestión del cambio y glosario de términos.
Para poder implantar los nuevos modelos de trabajo a distancia, Telefónica sitúa al empleado en el centro rodeándole de todos los dispositivos, herramientas y servicios que necesita para trabajar, comunicarse y colaborar en un entorno seguro, potenciando al máximo su flexibilidad y movilidad y asegurando el éxito del cambio a una cultura más digital.
Para Telefónica, el mapa tecnológico del entorno del teletrabajo incluye: una conectividad segura; una gestión y soportes unificados; unas políticas de seguridad; comunicaciones fijas y móviles; dispositivos y accesorios; productividad y colaboración; herramientas para el empleado digital y escritorios de aplicaciones virtuales, cuyo uso se ha incrementado entre las grandes empresas en más de un 60% según datos de Telefónica.
En el libro también se destacan los retos y beneficios que supone el teletrabajo. Entre los retos destacan el mantenimiento de los KPIs de rentabilidad y gestiones comerciales a pesar de trabajar en remoto.
Entre los beneficios destacan: una mejora de la productividad (menos distracciones que en el lugar de trabajo); una reducción del absentismo laboral (este indicador disminuye al flexibilizar los horarios para conjugar necesidades laborales y familiares); un mayor compromiso (la compatibilidad de las jornadas laborales y procesos impactan en la motivación); el fomento de la responsabilidad (la confianza de la empresa en el trabajador que sigue su propio horario dispara el orgullo de pertenencia) y que las empresas se hacen más atractivas para los empleados con un mejor curriculum profesional.