
La reciente venta de Telefónica Argentina a Telecom Argentina por US$1.250 millones ha despertado una rápida reacción del gobierno de Javier Milei, que ha ordenado una investigación sobre el posible impacto anticompetitivo de la operación. La transacción, que fue anunciada y cerrada el pasado lunes, forma parte de la estrategia de Telefónica para reducir su exposición en América Latina. Sin embargo, la administración argentina ha señalado que esta compra podría llevar a una concentración del 70 % del sector de telecomunicaciones en un solo grupo económico.
Reguladores analizan impacto en la competencia
El Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) y la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) serán los encargados de evaluar si la operación conlleva riesgos para la competencia. A través de un comunicado oficial, la oficina del presidente expresó su preocupación por el posible establecimiento de un monopolio en el sector.
«Esta adquisición podría dejar aproximadamente el 70% de los servicios de telecomunicaciones en manos de un solo grupo económico, lo que generaría un monopolio basado en décadas de beneficios estatales recibidos por dicha empresa», indicó la declaración. En el mismo texto, se aseguró que el gobierno tomará todas las medidas necesarias para evitar dicha concentración si las investigaciones confirman sus temores.
El proceso regulatorio será clave para definir el futuro del sector en Argentina, especialmente porque tanto Telefónica como Telecom Argentina surgieron de la privatización de la compañía estatal de telecomunicaciones hace más de 30 años. La administración de Milei ha defendido su postura de eliminar la burocracia y promover la libre competencia, pero la envergadura de esta operación ha obligado al gobierno a intervenir.
Factores políticos en la revisión del acuerdo
Más allá de los argumentos sobre la competencia, la revisión del acuerdo también ha estado marcada por factores políticos y económicos. Según un informe de La Nación, el actual ministro de Relaciones Exteriores, Gerardo Werthein, proviene de una familia cuyo holding empresarial compitió con Telecom Argentina por la compra de Telefónica.
Aunque el funcionario se ha desvinculado formalmente de la compañía de inversiones familiar, su pasado ha generado suspicacias sobre el alcance real de la investigación ordenada por el Ejecutivo.
Asimismo, Telecom Argentina es en parte propiedad del Grupo Clarín, que controla uno de los medios de comunicación más influyentes del país. Esto ha llevado a especulaciones sobre posibles intereses cruzados en la transacción.
Telefónica sigue replegándose de América Latina
La venta de Telefónica Argentina se enmarca en la estrategia de la empresa española de reducir su presencia en América Latina, una región donde enfrenta dificultades económicas y regulatorias. En los últimos años, Telefónica ha tomado medidas similares en otros mercados de la región:
- Perú: Telefónica se encuentra en un proceso de insolvencia y enfrenta disputas fiscales con el gobierno local.
- Colombia: La empresa avanza en la venta de su participación en Coltel a Millicom, operación que aún está bajo revisión de la Superintendencia de Industria y Comercio.
- Chile: Telefónica sigue explorando opciones de venta para su unidad local.
A pesar de estas desinversiones, la empresa mantiene operaciones en Brasil, uno de los pocos mercados latinoamericanos donde ha logrado estabilidad financiera.
Reacciones del mercado ante la operación
A pesar del escrutinio del gobierno argentino, la venta ha sido bien recibida en los mercados. Las acciones de Telefónica subieron un 1,2 % en la Bolsa de Madrid, alcanzando los 4,29 euros. Por su parte, los American Depositary Receipts (ADR) de Telecom Argentina subieron hasta un 6 % tras el anuncio del acuerdo.
Telecom Argentina financió la adquisición mediante un préstamo sindicado de entidades como Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), Deutsche Bank, Banco Santander y un crédito bilateral del Industrial and Commercial Bank of China (ICBC).
El futuro de la operación y la postura del gobierno
Si bien el gobierno de Milei ha enfatizado su compromiso con el libre mercado, el resultado de la investigación podría determinar el rumbo de la operación. De confirmarse la existencia de un monopolio, la administración podría tomar medidas regulatorias para bloquear la fusión o imponer restricciones a la empresa resultante.
Además, la revisión de la compra de Telefónica Argentina ocurre en un contexto en el que varias multinacionales han decidido salir del país, entre ellas ExxonMobil, HSBC y Mercedes-Benz, en respuesta a la crisis económica y la incertidumbre regulatoria.
Telefónica tiene previsto presentar sus resultados financieros anuales en los próximos días, lo que podría ofrecer más detalles sobre su estrategia de desinversión en América Latina. En su informe trimestral más reciente, la compañía minimizó la importancia de su unidad Hispam, que representa el 21 % de sus ingresos y el 12 % de su EBITDA, mientras prioriza su negocio en Europa y Brasil.
Incertidumbre sobre el desenlace de la venta
Independientemente del resultado de la investigación antimonopolio, la salida de Telefónica de Argentina parece irreversible. Si la venta a Telecom Argentina no recibe la aprobación regulatoria, la empresa española probablemente buscará otras alternativas para desprenderse de su filial en el país.
Por ahora, el futuro de la operación sigue en el aire, con la administración de Milei decidida a ejercer un control estricto sobre el proceso. El desenlace de esta transacción podría sentar un precedente importante para futuras fusiones y adquisiciones en el sector de telecomunicaciones argentino.