Bitcoin, la principal criptomoneda a nivel globa, ha alcanzado un nuevo máximo histórico, superando los 75.000 USD en medio de una reacción positiva en los mercados tras confirmarse la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Este ascenso, del 9% en las primeras horas del día, ha sido impulsado por la expectativa de un gobierno republicano más favorable hacia las criptomonedas y una posible reducción de las restricciones regulatorias.
Impulso electoral y atractivo institucional
Desde principios de 2024, Bitcoin ha experimentado un alza acumulada superior al 70%, en gran parte debido al crecimiento de su aceptación institucional y al contexto económico en evolución. En enero de este año, el lanzamiento de ETFs de Bitcoin al contado en EE.UU. por gigantes financieros como BlackRock y Fidelity marcó un hito, permitiendo la entrada de inversores tradicionales al mercado cripto.
Según datos de Binance Research, estos ETFs han captado colectivamente 63.300 millones de dólares, representando el 5,2% de la oferta total de Bitcoin, lo que subraya la creciente confianza de los inversores institucionales en la criptomoneda como un activo viable a largo plazo.
Javier García de la Torre, Director de Binance España y Portugal, destacó, en conversación con La Ecuación Digital, la relevancia de este nuevo máximo histórico, afirmando: «El ascenso de Bitcoin a este nuevo récord es un testimonio de su resistencia y atractivo como reserva de valor. Este hito pone de relieve el optimismo continuo que rodea a Bitcoin y su potencial de crecimiento sostenible tanto en los mercados tradicionales como en los emergentes».
Reacción de la industria y expectativas de la política regulatoria
La victoria de Trump es vista como una oportunidad para el sector cripto, que ha experimentado una serie de restricciones y acciones de cumplimiento bajo la administración Biden, especialmente a través de la SEC y su presidente, Gary Gensler. En contraste, Trump ha prometido adoptar un enfoque pro-cripto, comprometiéndose a convertir a EE.UU. en la capital global de las criptomonedas y a revisar la actual política regulatoria, la cual ha sido considerada por muchos actores del sector como limitante para la innovación.
Matthew Hougan, director de inversiones de Bitwise Asset Management Inc., afirmó que “la industria cripto siente que ha operado con una mano atada a la espalda durante años, y percibe que esto podría llegar a su fin”, en alusión al cambio esperado con la nueva administración.
Bit2Me también resaltó el impacto de los resultados electorales en el precio de Bitcoin. Javier Pastor, su Head of OTC, comentó a este medio que “este repunte en el precio de Bitcoin subraya las expectativas de un marco regulatorio más laxo con Trump en la Casa Blanca. Este contexto alimenta las proyecciones alcistas que sitúan el precio de Bitcoin en torno a los 200.000 USD para 2025, siempre y cuando se materialicen cambios regulatorios que promuevan la innovación y atracción de inversiones al sector cripto”. Además, Bit2Me pronostica la incorporación de figuras pro-cripto en posiciones clave, lo que podría resultar en un entorno más favorable para el crecimiento de la industria en EE.UU.
Impacto global y la reacción del mercado
El ascenso de Bitcoin en las últimas horas no ha sido un fenómeno aislado; el impacto positivo de la victoria de Trump también se ha reflejado en otras criptomonedas y en el mercado de valores estadounidense. Ether, la segunda criptomoneda más grande, registró un aumento del 8%, mientras que Dogecoin, conocida por su popularidad entre los seguidores de Elon Musk, partidario de Trump, se disparó un 31% en su punto máximo.
Las acciones de empresas tecnológicas y el dólar también experimentaron aumentos, impulsados por las expectativas de una política económica menos restrictiva y más favorable al crecimiento del sector tecnológico y cripto. Según informes de mercado, el sector cripto en su conjunto ha recibido esta noticia con optimismo, anticipando un periodo de crecimiento si se cumplen las promesas de la administración entrante.
El futuro regulatorio y la posición de la SEC
La comunidad cripto ha observado de cerca la evolución de las regulaciones en Estados Unidos, especialmente bajo la dirección de Gary Gensler en la SEC. La comisión ha adoptado un enfoque de cumplimiento riguroso, argumentando que el sector requiere una regulación adecuada para prevenir fraudes y proteger a los inversores.
En contraste, Trump ha señalado la necesidad de un marco más claro y favorable para el desarrollo de la industria cripto, y prometió destituir a Gensler en su primer día de mandato si es elegido oficialmente. Esta posible destitución se ha convertido en un tema de interés dentro de la comunidad de inversores, que ve en ello un símbolo del cambio de política hacia un enfoque más abierto y favorable para las criptomonedas.
Perspectiva para los inversores
La consolidación de Bitcoin como activo de interés institucional y el creciente optimismo de la industria ante un cambio político favorable sugieren un posible periodo de expansión para las criptomonedas en los Estados Unidos. Con una adopción en aumento, la criptomoneda ha superado el rendimiento de otros activos tradicionales como las acciones y el oro en 2024. Los ETFs de Bitcoin al contado han facilitado una mayor integración de esta clase de activos en las carteras diversificadas de los inversores, y los próximos años podrían ver un incremento en esta tendencia si el marco regulatorio se alinea con las expectativas de la industria.
Javier García de la Torre de Binance subrayó que “el nuevo máximo histórico demuestra el impacto de los desarrollos y avances dentro del panorama cripto, y refuerza la creciente alineación de los activos digitales con las tendencias financieras globales”. Para la industria, la perspectiva de un entorno regulatorio menos restrictivo podría significar un avance significativo, fortaleciendo a Bitcoin como una reserva de valor en la economía mundial y aumentando su protagonismo en las finanzas tradicionales.
