Editor en La Ecuación Digital. Consultor de Innovación y Estrategia…
Nvidia superó a Apple en capitalización bursátil el pasado viernes, según informó Reuters, situándose brevemente como la empresa más valiosa del mundo tras un repunte récord en sus acciones impulsado por la creciente demanda de sus chips especializados en inteligencia artificial. Según datos de LSEG, el valor de mercado de Nvidia alcanzó los 3,53 billones de dólares, apenas por encima de los 3,52 billones de Apple. Aunque Nvidia cerró la jornada con un alza del 0,8% y un valor de 3,47 billones, Apple también vio un ligero incremento del 0,4%, conservando así una valoración de 3,52 billones.
En junio, Nvidia logró brevemente esta posición antes de ser superada por Microsoft y Apple, en una competencia constante entre los gigantes tecnológicos cuyas valoraciones se han mantenido en cifras similares en los últimos meses. Actualmente, el valor de mercado de Microsoft se sitúa en 3,18 billones, con un incremento del 0,8% en su cotización.
La compañía de Silicon Valley, conocida desde los años 90 como fabricante de procesadores para videojuegos, ha dominado el mercado de chips para inteligencia artificial (IA) y se ha posicionado como líder en una carrera en la que competidores como Microsoft, Alphabet y Meta Platforms buscan destacar en esta tecnología emergente. Impulsada por la creciente inversión en IA, las acciones de Nvidia han subido alrededor de un 18% en octubre. Este crecimiento se vio favorecido tras el anuncio de una nueva ronda de financiamiento de 6.600 millones de dólares por parte de OpenAI, la compañía detrás de ChatGPT.
El viernes, las acciones de Nvidia y otros fabricantes de semiconductores también se beneficiaron de los sólidos resultados trimestrales de Western Digital, fabricante de almacenamiento de datos, lo que reforzó el optimismo respecto a la demanda en centros de datos. “Cada vez más empresas adoptan la inteligencia artificial en sus operaciones cotidianas y la demanda de chips de Nvidia sigue siendo robusta”, afirmó Russ Mould, director de inversiones de AJ Bell. “Nvidia está en una posición favorable y, si se evita una gran recesión en Estados Unidos, se espera que las empresas sigan invirtiendo fuertemente en capacidades de IA, lo que representa un impulso positivo para la compañía”.
Este impulso se consolidó cuando las acciones de Nvidia alcanzaron un máximo histórico el martes, en parte debido a los resultados de TSMC (2330.TW), el mayor fabricante mundial de chips por contrato, que reportó un crecimiento del 54% en sus ganancias trimestrales, impulsado por la elevada demanda de procesadores para IA.
Apple, por su parte, enfrenta dificultades debido a la débil demanda de sus smartphones, especialmente en China, donde sus ventas de iPhone cayeron un 0,3% en el tercer trimestre mientras que las ventas de Huawei aumentaron un 42%. Se espera que Apple informe sus resultados trimestrales el próximo jueves, con previsiones de un incremento de ingresos del 5,55% anual, alcanzando los 94.500 millones de dólares, según datos de LSEG. Para Nvidia, los analistas proyectan un crecimiento de ingresos del 82%, rondando los 32.900 millones de dólares.
Las acciones de Nvidia, Apple y Microsoft tienen una fuerte influencia en el sector tecnológico y en el mercado estadounidense en general, representando alrededor de una quinta parte del peso del índice S&P 500. El optimismo en torno a la IA, la expectativa de que la Reserva Federal reducirá significativamente las tasas de interés y un inicio positivo de la temporada de resultados han contribuido a que el S&P 500 alcanzara un máximo histórico la semana pasada.
El espectacular rendimiento de Nvidia también ha impulsado su popularidad entre los operadores de opciones, posicionándola como una de las acciones más negociadas en el mercado de opciones en los últimos meses, según datos de la firma de análisis Trade Alert. En lo que va del año, sus acciones han subido casi un 190%, impulsadas por el auge de la IA generativa y una serie de previsiones financieras optimistas.
Rick Meckler, socio de Cherry Lane Investments, apuntó que el desafío de Nvidia radica en mantener esta sólida fuente de ingresos, advirtiendo sobre el papel de las emociones de los inversores en la valorización de sus acciones. “La pregunta es si esta fuente de ingresos perdurará en el tiempo y si estará impulsada más por el entusiasmo de los inversores que por la capacidad de confirmar o refutar que la IA está sobredimensionada”, comentó Meckler. “Creo que Nvidia es consciente de que, a corto plazo, sus cifras probablemente serán muy destacadas”.