La compañía ASHO presentará en noviembre, durante un congreso en Montevideo, una nueva solución tecnológica basada en Inteligencia Artificial que permite identificar indicios de infarto cerebral en historiales médicos, con el objetivo de mejorar la atención sanitaria.
Juli Climent, director del área de IA en ASHO, detalló que esta tecnología aprovecha la capacidad de la IA para gestionar y explotar datos en tiempo real y de registros históricos, lo que resulta clave en el manejo de historiales clínicos antiguos. Según Climent, la implementación de codificación automática en CIE10 en servicios de urgencias ha aumentado significativamente la eficiencia de estos procesos. «Codificar manualmente el volumen de datos que manejamos sería imposible sin la IA. Esta automatización no solo mejora la calidad del servicio, sino que permite un acceso inmediato y preciso a la información médica relevante», explicó.
Uno de los retos más grandes en la sanidad, según Climent, es estructurar información desordenada. “La mayoría de los datos en el sector están dispersos y carecen de normalización, lo que complica su análisis, especialmente en historiales antiguos. Nuestra herramienta está diseñada para rescatar y estructurar esa información, facilitando así la toma de decisiones clínicas informadas”, añadió.
Presentación de la nueva tecnología en Montevideo
ASHO revelará su nueva herramienta en el Congreso de IA de Lenguas Iberoamericanas el próximo noviembre. Esta solución, según la compañía, no solo permite rescatar información de registros antiguos, sino que es capaz de identificar patrones asociados con infartos cerebrales.
El objetivo es facilitar la detección temprana de estos precursores, mejorando la atención preventiva y la eficiencia en la gestión de casos críticos. La automatización de este proceso ofrece al personal sanitario una capacidad mejorada para intervenir rápidamente y proporcionar un tratamiento personalizado.
Hacia un sistema sanitario más interconectado
La interoperabilidad de los sistemas de información sanitaria es un aspecto crucial para el avance del sector, y ASHO busca liderar en este ámbito mediante la implementación de modelos avanzados de lenguaje entrenados con documentación clínica específica. Climent anticipa que en los próximos años estos modelos serán comunes en los centros de salud. «Estos sistemas permitirán a los profesionales con conocimientos en estas tecnologías sacar mayor provecho de los datos clínicos disponibles, mejorando así la atención al paciente y optimizando los recursos hospitalarios», comentó.
A pesar de los beneficios que estas herramientas pueden aportar, Climent advierte sobre las dificultades de trabajar con información codificada bajo distintos estándares. “El sector sanitario cuenta con un gran volumen de estándares, y no todos los profesionales están familiarizados con ellos. La interoperabilidad depende de que se adopten códigos comunes que faciliten el acceso y la gestión de información entre los distintos sistemas de salud”, afirmó.
Un acceso equitativo a la tecnología
Una de las prioridades de ASHO es que sus soluciones sean accesibles para todos los centros de salud, independientemente de su tamaño. Climent asegura que la experiencia de uso es uniforme tanto para grandes hospitales como para pequeños centros de salud comarcales. «El objetivo es que todos los establecimientos puedan beneficiarse de nuestros productos sin importar su volumen de datos. Así garantizamos que la tecnología llegue a todos los niveles del sistema sanitario», concluyó.
La implementación de estas soluciones busca no solo optimizar la eficiencia operativa en los hospitales, sino también mejorar de forma significativa la calidad de la atención médica que se proporciona, ofreciendo herramientas que permitan a los profesionales del sector trabajar de manera más eficaz y con un acceso inmediato a información vital para la salud de sus pacientes.