Editor en La Ecuación Digital. Consultor de Innovación y Estrategia…
En el MWC24 en Barcelona, hemos presenciado una confluencia de tecnologías que están redefiniendo el sector. Desde la reveladora ponencia sobre algoritmos cuánticos de Elena Wisbe de Oxford Quantum Circuits, que prometen abordar algunos de los desafíos más complejos de la humanidad, hasta la presentación del Humane AI Pin, un dispositivo en desarrollo que aspira a ser un asistente virtual personal, el evento ha sido un escaparate de innovaciones destinadas a impactar nuestro futuro de manera significativa.
Una de las revelaciones más notables fue el prototipo del primer móvil 6G de Ericsson, un dispositivo de tamaño considerable que presagia la próxima generación de comunicaciones móviles. Este prototipo, aún en una etapa temprana y desarrollado en parte en el Hub de Innovación que Ericsson tiene en Madrid y donde trabajan 800 ingenieros y científicos, simboliza el futuro de las redes 6G que se espera reemplacen al 5G y 5.5G hacia finales de esta década. También me llamó la atención algunos proyectos futuristas como las Lightpole 6550 y 6750, que prometen integrar conectividad, iluminación LED, estaciones barométricas y cámaras de vigilancia en una sola infraestructura urbana.
Extend introdujo xos, un sistema operativo que promete abrir nuevas posibilidades en la colaboración entre humanos y robots, sugiriendo un futuro donde la eficiencia y la telepresencia digital se vuelven cotidianas. Además, la capacidad de la IA y el aprendizaje automático para transformar la renderización 3D y la producción de gemelos digitales, como demostró Meet Kai, anticipa una revolución en la seguridad y operaciones de instalaciones industriales.
En este contexto, Ericsson ha desplegado una amplia gama de tecnologías que definen el futuro de las redes, centradas en la eficiencia, sostenibilidad, apertura y automatización. Las demostraciones desde realidad aumentada hasta comunicaciones críticas en misiones mostraron cómo el 5G de baja latencia puede ser crucial para situaciones de vida o muerte, como la prevención de incendios forestales. La compañía presentó también su visión para el 6G y soluciones sostenibles que prometen revolucionar las arquitecturas de red actuales y reducir el consumo energético y las emisiones de carbono.
Ameca, presentado como el robot humanoide más avanzado en el Mobile World Congress en Barcelona, ha sido una de las estrellas por su capacidad para hablar y mostrar expresiones faciales. Desarrollado por Engineered Arts, una empresa británica, este robot no solo puede mover brazos y piernas, sino que también exhibe una gama de emociones en un rostro que parece casi humano. Diseñado para interactuar directamente con las personas, Ameca se perfila para roles como recepcionista o guía de museos, gracias a su inteligencia artificial entrenada con GPT-4 y cámaras que le permiten reconocer y responder a las expresiones faciales humanas de la manera más natural posible.
Con el anuncio del primer coche volador real por parte de Jim Dukovny, CEO de Aleph Aeronautics, y el discurso sobre las aplicaciones futuras del grafeno por el Premio Nobel de Física Konstantin Novoselov, el MWC24 ha trascendido los límites de la innovación, apuntando hacia un futuro donde la tecnología y la humanidad avanzan juntas hacia un mundo más inteligente y sostenible.
Al acabar este tercer día del Mobile World Congress, queda patente que no solo hemos mostrado lo ingeniosos que somos y nuestra ambición por un futuro mejor, sino que también hemos subrayado que la tecnología, en su núcleo, pretende ser una fuerza positiva, borrando las fronteras entre lo que hoy es posible y lo que podremos lograr mañana.