Telefónica, ante la urgencia de acelerar todos la reducción de GEI (gases de efecto invernadero), decide subir un escalón en sus ambiciones y plantea como su hoja de ruta su Plan de Acción Climática en el que escala sus compromisos y se compromete a reducir sus emisiones operacionales en un 90% en 2030 con la vista puesta en alcanzar su Cero Neto Emisiones en 2040, adelantándose 10 años a los acuerdos internacionales, en línea con las prioridades marcadas por la presidencia de la Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, COP 28.
El último informe de Naciones Unidas muestra que el mundo está yendo demasiado despacio para abordar el cambio climático. Por ello, en el transcurso de la COP 28 se realizará un balance sobre los avances que se suscribieron en el Acuerdo de París, hace siete años, cuyo objetivo era limitar el calentamiento mundial por debajo de 2ºC, preferiblemente a 1,5ºC, en comparación con los niveles preindustriales. Ormazabal lo suscribe y apunta que “la COP28 tiene que ser un verdadero revulsivo, un catalizador del cambio para conseguir acelerar y nosotros mostraremos nuestros avances para llegar al Cero Neto en 2040”.
Para garantizar el cumplimiento de sus objetivos medioambientales a corto, medio y largo plazo, Telefónica cuenta con un Plan de Acción Climática, aprobado por el Consejo de Administración, en el que establece los objetivos y medidas, respaldados por la ciencia, para apoyar su transición hacia una economía baja en carbono.
Este plan permite a Telefónica ser más eficiente y resiliente. De hecho, la operadora ha logrado reducir un 80% las emisiones operacionales (alcance 1 y 2) en todo su perímetro global y un 51% incluyendo toda su cadena de valor, lo que supone 1.458 ktCO2e menos emitidas a la atmósfera. De esta forma, la operadora ha alcanzado el objetivo planteado para 2030 con 8 años de antelación.
Cabe destacar también que, gracias al proceso de transformación de sus redes, el despliegue de fibra óptica y el 5G, ambas más de un 80% más eficientes que sus tecnologías predecesoras y a la implementación de más de 1.500 proyectos de eficiencia y gestión energética, la compañía ha conseguido reducir en 2022 el consumo energético un 7,2% comparado con 2015, a pesar de que el tráfico gestionado por sus redes ha aumentado 7,4 veces. Asimismo, el consumo eléctrico global de Telefónica procede en un 82% de fuentes renovables, siendo del 100% ya en Brasil, Europa, Perú y Chile.
Participación en la COP28
Telefónica se suma a las intervenciones sectoriales en la cumbre como parte de la Green Digital Action, nueva iniciativa promovida por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU), organismo especializado de las Naciones Unidas, con el objetivo de mejorar la colaboración, acelerar los compromisos de toda la industria para hacer frente a los retos climáticos y situar las soluciones digitales a la vanguardia de la acción por el clima.
Así, la directora de Medio Ambiente de Telefónica explicará el 3 de diciembre su Plan de Acción Climática, un referente para otras empresas del sector, que pretende reducir su huella de carbono con objetivos alineados con la ciencia y acciones transversales a toda la organización.
En el marco de la iniciativa “Conectividad digital y tecnologías para la iniciativa Alerta Temprana para Todos”, también parte de la Green Digital Action, Ormazabal explicará el sistema de alerta que ha desplegado la compañía para advertir a la población en caso de desastre natural inminente o emergencia.
Telefónica también estará presente en el Pabellón de España para hablar de la necesidad de movilizar más inversión para la acción climática. La compañía, al igual que el sector, aboga por mejorar la representación del sector de telecomunicaciones en las taxonomías de actividades sostenibles. Pionera en bonos verdes, Telefónica acaba de anunciar que alrededor del 40% de su financiación total estará ligada a criterios ESG en 2026.