Las empresas de energía y utilities que han implantado modelos de nueva energía han reportado múltiples beneficios, según el nuevo informe del Instituto de Investigación Capgemini Remodeling the future: How energy transition is driving new models in energy and utilities .
Los nuevos modelos energéticos están transformando todo el sector de la energía y utilities, ya que atenuar el impacto del cambio climático se ha convertido en su razón de ser. No en vano, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) relacionadas con la energía contribuyen a más del 73% de todas las emisiones a nivel mundial.
El cambio climático y la demanda de los inversores son los principales motores del cambio. Casi el 70% de las empresas de energía y utilities afirma que la mitigación del impacto del cambio climático está impulsando su cambio hacia nuevas formas de hacer negocios, y el 63% cita la demanda de los inversores como motor del cambio. Aunque sólo el 44% de los directivos se guía por la rentabilidad como principal motor del cambio a nuevos modelos, los beneficios potenciales para el resultado final son evidentes.
Según el nuevo informe, las organizaciones que están implantando modelos de energía limpia han logrado una reducción del 4,6% en las emisiones de alcance 3 y se espera una reducción adicional del 13% en los próximos tres años, mientras que algunas también están experimentando un aumento del 6% en los ingresos.
Bueno para las empresas y el planeta
Los nuevos modelos de energía también están generando más oportunidades de venta para las organizaciones y la atracción de nuevos clientes. Las empresas de todo el mundo ya han conseguido un aumento del 4% en las oportunidades de venta gracias los nuevos modelos, y se espera que en los próximos tres años la cifra aumente hasta el 9,2%.
La estrategia y las competencias son retos fundamentales
El sector sigue en estado de transición y, aunque la necesidad crítica de transformación es evidente, son muy pocas las organizaciones que aplican actualmente nuevos modelos de energía. Por ejemplo, a pesar de que el 64% de las organizaciones tiene previsto implantar soluciones de almacenamiento de energía en el futuro, sólo el 19% ya lo está haciendo.
Según el informe, la mayoría de las organizaciones aún no ha creado una estrategia empresarial de nuevas energías. De hecho, sólo el 18% de los encuestados afirma tener una estrategia global con objetivos bien definidos y plazos previstos.
Además, las capacidades necesarias para los nuevos modelos energéticos, como las fuentes de energía alternativas y las plataformas energéticas, difieren enormemente de las capacidades actuales de las empresas de energía y utilities.
La investigación muestra que el 70% de las organizaciones actuales reconoce carecer de las capacidades necesarias para desarrollar nuevos modelos. Las organizaciones se ven frenadas en áreas como la experiencia tecnológica interna y el enfoque en las nuevas tecnologías (68%), las habilidades relacionadas con los servicios (62%) y la experiencia en datos (56%).
Acciones para acelerar la aplicación
En los próximos años, los niveles de implementación requerirán una aceleración urgente si se pretende hacer realidad las aspiraciones.
Según Peter King, responsable global de Energía y Utilities de Capgemini Invent: «La transición energética es el motor de la década. Las empresas deben empezar elaborando estrategias en toda la organización para garantizar el éxito de un programa de transición energética. También es evidente la necesidad de aumentar el ritmo y la innovación. Sólo un tercio de las organizaciones está operando una función de innovación global para desarrollar y probar nuevos modelos e industrializar los resultados. Es hora de que los actores adopten una filosofía fail fast (o de fracaso rápido) y forjen nuevas asociaciones, tanto dentro como fuera de los ecosistemas existentes».
Más allá de la estrategia y la innovación, el informe también señala la necesidad urgente de invertir en el desarrollo de las competencias tecnológicas y de datos, necesarios para transformar las operaciones empresariales. A medida que el sector de la energía y utilities sigue experimentando un cambio masivo en toda su cadena de valor, las organizaciones que ya están cosechando los beneficios de una ventaja inicial están demostrando un cambio en la mentalidad interna. El éxito de la implementación y la ampliación de los nuevos modelos energéticos requerirá un fuerte apoyo de liderazgo por parte de toda la alta dirección.
